Rezar

 SINOPSIS 


REZAR

Marcela, con mucho trabajo y riesgo para su vida, había dejado en el pasado una historia de violencia género, o al menos eso pensaba, porque un día recibe un misterioso llamado para ponerla a prueba: al teléfono una mujer desesperada le pide ayuda.

BASADA EN HECHOS REALES.

¿Cuándo empezó su tortura? ¿Cómo se transformó en un monstruo? ¿Cómo no se dio cuenta? ¿Por qué no pidió ayuda? ¿Por qué no se dejó ayudar? ¿Por qué ocultaba su situación? ¿Por qué se recluyó? ¿Por qué seguía atada a él?

Porque estaba presa de una relación enferma, y privada de su libertad se sentía sola, aislada, y nadie parecía entenderla.

DIOS NUNCA SE LO REPROCHÓ, PORQUE NO SE METE EN CIERTAS DECISIONES.


RESEÑA 


Las palabras, en ocasiones, pueden matar poco a poco. Para la Marcela de hace 10 años, la vida fue un camino repleto de tormento y desconsuelo. Todo empezó desde el momento en el que conoció a su jefe, Jose María, un hombre al que todos adoraban y les parecía encantador. La relación entre ambos se fue estrechando cada vez más hasta que finalmente, su vínculo no sería exclusivamente laboral.

Tras el paso de estos años, Marcela pensaba que las heridas del pasado habían cicatrizado, se sentía feliz con su nueva vida. No quería descubrir si en su interior, el corazón estaba recuperado, o por el contrario, las ofensas recibidas residían todavía dentro de ella. 

Todo el peso de aquellos días recae sobre Marcela cuando recibe una inesperada llamada que removerá lo que creía olvidado, pero que se escondía en un recóndito recoveco de su alma. Esta petición de socorro la realiza en un acto de rebeldía y de mucha valentía, Ale, una mujer con muchas ilusiones al principio pero que se han ido esfumando tras el infierno vivido. Ambas tienen algo en común y es el hombre que estuvo a al lado de ellas. Las une la misma historia. 

Jose María les quitó todo lo que tenían hasta conseguir hacer de ellas unas mujeres sumisas, les arrebató su ser para convertirlas en cáscaras vacías. Las tachaba de despechadas y locas ante el resto de personas y nadie se daba cuenta de lo rotas que se sentían por dentro, eran incapaces de relatar las torturas sufridas a manos de este violento hombre. Hasta que, todo cambió, en un instante. Esa llamada marcó un antes y un después para Marcela y Ale. 

Este es un libro muy duro pero necesario. Conocer de primera mano como sobrellevan muchas mujeres estas trágicas situaciones y saber que existe una salida ante tales injusticias. El autor logra que vivamos muy de cerca los sucesos que ocurren a los personajes y nos muestra el gran problema que afecta, por desgracia, en la actualidad a tantas mujeres. 

Porque Marcela sabía que Ale era ella. Ambas eran todas buscando justicia. 





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